¿Quién no piensa en un guiso delicioso o en una buena sopa “de la abuela” al escuchar la palabra lentejas? Esta legumbre es considerada uno de los alimentos con mayores beneficios para la salud y es muy valorada por quienes les gusta cuidar su salud mediante la alimentación.

Aunque originalmente previene del Medio Oriente, las lentejas han conquistado todos los continentes y están presentes en la dieta diaria de muchas personas alrededor del mundo.

Características de las lentejas

El consumo de lentejas data desde épocas ancestrales, se sabe que en Oriente Medio, durante la edad de piedra, estos granos eran uno de los cultivos más valorados por los humanos. Desde entonces eran incorporadas en la dieta diaria asiática, hasta que con la expansión de las culturas, llegaron a Europa, donde hoy en día tienen casi la misma importancia que las judías o los guisantes. Un dato curioso es que en la biblia se menciona un plato de lentejas en una de sus historias.

Estas entran en la categoría de leguminosas y su apariencia es parecida a la del frijol solo que en tamaño diminuto. Se desarrollan en vainas y por lo general pueden tener una gran variedad de colores, desde verde, hasta rojas.

Las lentejas crecen en plantas anuales que son poco exigentes. Estas prefieren los climas templados para desarrollarse. Dichas plantas pueden crecer hasta medio metro de altura y producen unas flores azules o blancas. Los granos crecen dentro de una vaina con uno o dos centímetros de largo.

Son muchos factores los que han intervenido en que sean alimentos de gran popularidad en el mundo entero. No obstante, podríamos decir que su precio tan bajo y facilidad de preparación son los responsables directos.

Propiedades nutricionales de las lentejas

Las lentejas son granos nutritivos que aportan un bajo contenido de grasa. Cada 100 gramos tiene aproximadamente 116 kcal y solo 0,4 gramos de grasa, esto significa que poseen menor contenido calórico que el arroz o la pasta. Estas son una fuente particularmente alta de proteínas que pueden ser usadas por el organismo cuando se combinan con algún cereal.

Tienen 40 gramos de carbohidratos por cada porción de 100 gramos, oligoelementos y minerales como el zinc, calcio, potasio, fósforo, hierro, selenio y magnesio.

Las vitaminas que contienen en mayor proporción son las A, complejo B, E, K y una pequeña dosis de vitamina C.

En cuanto a fibra dietética, las lentejas poseen 9 gramos por cada 100 gramos y si se consumen sin retirar la cáscara, se pueden obtener hasta 11 gramos de fibra por cada porción. Esto significa que aportan ⅓ de lo que necesita el cuerpo en la ingesta diaria.

Beneficios de las lentejas

1.   Ideales en regímenes alimenticios

Las lentejas son el alimento perfecto para perder peso o mantener la figura por su alta proporción de fibra y carbohidratos. Estos componentes ayudan a que tengamos sensación de saciado por más tiempo, además ayudan a que los niveles de glucosa en la sangre se mantengan estables. Así no tenemos el impulso de comer frecuentemente.

2.   Mejorar la salud cardiovascular

La ingesta alta de fibra ayuda a regular el colesterol en la sangre, lo que se asocia directamente con una menor incidencia de patologías cardiovasculares.

3.   Mejoran la salud de las embarazadas

Tienen una gran cantidad ácido fólico, elemento indispensable para prevenir algunas enfermedades en los recién nacidos y que se debe consumir durante el embarazo.

4.   Aportan muchas proteínas

Son un buen sustituto de carne en las dietas vegetarianas o veganas, ya que aportan incluso más proteínas de las que poseen las carnes rojas.

5.   Fortalecen el sistema inmune y el sistema nervioso

El  magnesio que contienen es un elemento potente a la hora de nutrir las células del sistema nervioso porque interviene en sus procesos metabólicos. Solo consumiendo 100 gramos de lentejas obtenemos la mitad de lo que el cuerpo necesita diariamente.

Como resultado de su consumo se promueve la memoria y el organismo se vuelve menos propenso al estrés.

De igual modo posee buena cantidad de vitamina A, la cual pasa a formar parte de las células ubicadas por detrás de la retina en el ojo e interviene en la formación de glóbulos blancos mejorando el sistema inmune